La primera consideración sobre eso que se ha llamado Brexit es la diferencia de tratamiento que tiene Europa con los diferentes países. Si esto fuera Grecia no les parece que las palabras serían más atrevidas, con menos respeto. Pero, claro, es el Reino Unido, la City, el dinero, la demostración de que no estamos en la Europa de los pueblos sino de los ricos. Lo que ha pasado con el referéndum en Inglaterra no es una cuestión de ultranacionalistas, al menos no solo esto. Es la constatación de que la Comunidad europea ha abandonado cualquier forma de sensibilidad con aquellos que la crisis ha azotado más duramente. Europa se ha dedicado a repartir dinero para luego mandar al cobrador de Alemania, de Francia a cobrar los intereses. No se educa solo con dinero, no les parece?
¿Ha dicho algo Europa sobre nuestra corrupción, de nuestras malas inversiones públicas, sobre nuestros jóvenes que emigran? Para esta Europa somos un lugar de veraneo. Ha cambiado algo desde la crisis? No tenemos un nuevo modelo productivo que no nos haga dependientes del cacareado turismo o de la construcción. Todo indica que seguimos siendo un país dependiente, dependiente de lo que ocurra en el exterior, incluso las fábricas de coches nos hacen depender del extranjero, Francia, Alemania etc.
Pero en Inglaterra fue el partido conservador quien ha convocado el referéndum y eso parece que hace al mundo más educado, más considerado. A Grecia se le ha ahogado económicamente y espiritualmente, nos atreveremos con el Reino Unido o se harán mil tratados para compensar el Brexit. Algo que por otra parte ya estaba previsto.
La política de recortes y de ahogamiento solo lleva a que cualquier mensaje cale en uno u otro sentido. Me asombra la educación con la que se han tomado los gobiernos europeos este referéndum. Inglaterra se ha separado de la riqueza desconsiderada, es la pobreza la que ha votado, la marginalidad que cada día crece más. No se educa solo con dinero, con esto solo se suele mal educar. Europa se tendrá que bañar otra vez en los mares espirituales de Grecia, mal que le pese.