No pasa ni un día sin que alguien me llame para que vuelva”. Su soberbia actitud ante las cámaras o en cualquiera de las mesas redondas en las que participa, le infieren un halo de superioridad insoportable. Y con la primera frase, indica hasta donde llega su egocentrismo.
Pero la realidad es que, de sus 14 ministros, 12 han pasado por los juzgados o por la cárcel. Llama la atención de que “el mejor ministro de economía de la democracia”, como dijo Aznar en su día, Rodrigo Rato, ahora esté más en la cárcel que en la calle, habiéndosele descubierto otro marrón, por lo que se pretende sentar en el banquillo por delito fiscal, blanqueo y corrupción. Fue Gerente del FMI, hasta que se le descubrió blanqueo de dinero siendo ministro y director del FMI. Atesoraba ya siete millones euros en el extranjero. Las empresas de Rato, facturaron 82 millones entre 1998 y 2004, a compañías que él había privatizado siendo vicepresidente de. Matas, el que más tiempo echó en la cárcel; Zaplana, también fue a la cárcel, hasta que fue excarcelado por su estado de salud. etc.
Yo me pregunto si, con estos bagajes, se puede presumir de su gestión. Pero, luego, hay otro tema; y es la relación tan estrecha con Bush, habiendo hecho siete viajes a los EEUU, en el Phanton que ahora tanto les escandaliza su uso por Sánchez, pies en la mesa incluidos, frente a uno sólo a Centroeuropa, y en los que planearon la invasión de Irak, postulándose ante Bush, para convencer a gobiernos latinoamericanos con el fin de que apoyaran la invasión. No fue una gestión fructífera, y con Europa, tampoco podían contar, siendo la exposición sobre la existencia de armas de destrucción masiva, un fiasco. Las falsedades sobre esa existencia, ya las conocemos. Pero la invasión estaba decidida, hasta el punto de llevar a decir a Jeff Bush, en un viaje a España, “En seis meses, la república de España conocerá los beneficios que le reportará haber apoyado la invasión”. Masacraron, y, después de colocar a un gobierno títere, les robaron el petróleo a través de un oleoducto hasta el Mediterráneo, a través de Turquía. Para eso perpetraron la invasión.