la opacidad del Gobierno a la hora de explicar el reparto de los fondos europeos ha despertado las sospechas en la UE. De hecho, Bruselas ha reprochado por carta a Moncloa que no haya creado ya la unidad de seguimiento del fondo de recuperación, que prometió Pedro Sánchez el pasado mes de julio a la presidenta de la Comisión, Ursula Von der Leyen. A esto le sumamos que el reglamento comunitario exige “procesos sólidos de control”, algo que tiró por tierra el dictamen del Consejo de Estado. Sánchez pretende que sean los 22 ministros, además de él mismo, por supuesto, y siete altos cargos, los que lo controlen todo. Sin embargo, el resto de países ha optado por organismos independientes y autónomos para realizar esa tarea.