EL Ministerio de Sanidad no las tiene todas consigo, pese a los buenos datos que parece ofrecer la pandemia, y aspira a cerrar perimetralmente todas las comunidades autónomas, desde el puente de San José hasta pasada la Semana Santa. Es lo que pretenden, en el fondo, la mayoría de las comunidades autónomas. De hecho, algunas ya han ido más allá, como Asturias, que prohibe la apertura de los establecimientos hoteleros hasta después de Semana Santa. En el otro lado está Isabel Díaz Ayuso. La presidenta de Madrid, que hace del enfrentamiento con el Gobierno su bandera, está dispuesta a ir hasta donde haga falta para que los madrileños puedan salir de puente. Lo curioso es que a Ayuso le ha salido un inesperado aliado, ya que Cataluña también baraja que los suyos puedan abandonar la comunidad. Por ahora hablan de que tendría que ser para visitar a familiares, pero, en realidad, todos sabemos que si se abre una brecha se romperá la presa. Veremos lo que al final sucede, pero parece que tenemos debate para rato.