La Consellería do Mar avanza en el proceso que podría permitir al sector marisquero de la ría de Ferrol realizar campañas de extracción de vieira con mayor regularidad. Para ello, el departamento que dirige Rosa Quintana tiene que probar que las analíticas que miden la concentración de toxina amnésica –ASP– en el bivalvo una vez eviscerado está por debajo de los parámetros que establece en la propuesta que va a elevar a la Unión Europea.
Mar afirma que el consumo de vieira es seguro si, tras su evisceración, se establece un límite conjunto –y no por separado, como hasta ahora– de 4,6 miligramos de toxina por kilo de carne en gónada y músculo, las partes comestibles del bivalvo que llegan al consumidor.
Esta opción ha sido analizada por organismos como el comité científico de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición –Aesan–. En los estudios realizados se comprobó que la seguridad para el consumidor es igual de alta si la concentración de ASP se mide en músculo y gónada por separado o en ambas conjuntamente.
Otras muestras
En estos momentos, Mar ya ha recopilado todos los datos de los análisis de biotoxinas que dependen directamente de los laboratorios del Instituto Tecnolóxico para o Control do Medio Mariño de Galicia, pero aún faltan por incluir los que facilitan las empresas evisceradoras, que son, recuerda la Consellería, imprescindibles para disponer de un mapa real de la situación y, si finalmente los datos avalan su tesis, solicitar a la UE un cambio en los límites establecidos.
De esta manera, la Consellería pretende “favorecer unha maior actividade do sector”, una posición que comparte Jaime Gabarri, patrón del “Ralmar”, inmerso en la primera campaña de vieira desde 2018. “Para nós”, explica, “sería moi importante que esta modificación fose para adiante, pois estamos convencidos de que os datos nos van dar a razón; a parte comestible da vieira nunca superou en conxunto os límites actuais e o consumidor segue protexido”.
Piezas en abundancia y de buena calidad en el arranque de la primera campaña desde 2018
“Hay mucha y muy buena”. El patrón del “Coviña”, Alberto Pardo, destacó la cantidad y la calidad de la vieira recolectada ayer en la zona II de extracción de pectínidos de la ría –desde la línea imaginaria que une Punta Vispón y Cabo Leiras hacia el fondo–. Fue la primera jornada de extracción de este bivalvo en una campaña desde mediados de 2018, cuando por última vez los barcos con arte de rastro de vieira pudieron salir a faenar tras comprobarse unos niveles de toxina amnésica inferior al máximo permitido por la normativa.
Junto con el “Coviña”, otros once barcos de las cofradías de Ferrol, Mugardos y Barallobre extrajeron los 3.000 primeros kilos de una campaña que, si se completa –siempre condicionados por las analíticas de seguimiento de la toxina ASP–, habrá concluido con 42 toneladas de vieira en las 14 jornadas previstas.
El patrón del “Coviña” subrayó asimismo que, tras tanto tiempo sin poder recoger vieira de la ría, “hay demanda por parte de las evisceradoras, por lo que habrá salida para el producto”, un marisco que, pese a su “calidad”, reiteró, tiene que competir con la vieira de fuera.