La ciudad naval, junto a Santiago y A Coruña, son las tres grandes urbes gallegas que aplicaron mayores rebajas fiscales para paliar los efectos de la pandemia de coronavirus en el tejido económico de su área de influencia, según detalla el último informe del Observatorio Municipal Gallego, dependiente de la Red Localis. De acuerdo con el estudio, Vigo, Ourense y Pontevedra se situarían al otro lado del espectro, aunque las dos últimas, junto a Lugo y Santiago, mostraron una mayor predisposición por las ayudas directas.

El informe, que destaca el gran papel de las entidades locales en la lucha contra los efectos de la pandemia dada su cercanía con la sociedad frente a administraciones superiores, se muestra positivo con las previsiones de futuro del área, destacando su “excelente salud financiera” de cara a afrontar las consecuencias del covid. A pesar de ello, la entidad recomienda que la suspensión de las medidas fiscales aplicadas en cada territorio debe extenderse hasta 2022 para asegurar la solvencia administrativa.

Medidas

En cuanto a las medidas concretas aplicadas por cada urbe para contrarrestar los cierres durante el estado de alarma y la desaceleración en la actividad económica, el informe destaca que en Ferrol se optó por la exención de la tasa de ocupación de la vía pública para la instalación de terrazas y se retrasó el plazo de pago voluntario de determinados impuestos municipales. En el caso el IBI y el IAE, estos plazos se prorrogaron hasta el mes de diciembre y para el IVTM, hasta julio.

Estas medidas fueron muy similares a las aplicadas en el resto de ciudades gallegas –el ejemplo más similar es Lugo–, aunque no contó con iniciativas particulares hacia escuelas infantiles, como sí lo hizo esta. Esto contrasta, por ejemplo, con el caso de Pontevedra, que aplazó los impuestos hasta el final del estado de alarma y estableció un plan de pago fraccionado, pero sin medidas concretas para la hostelería.

2021

Por otra parte, el informe detalla las diferentes medidas que se están aplicando el presente año hasta el final del estado de alarma.

En el caso de Ferrol, la tendencia es continuista en lo referente a las terrazas, pero cuenta con importantes apuestas particulares de cara a los sectores más afectados. A modo de ejemplo, se aplicará un descuento del 20% en el IBI para sectores como la hostelería, el comercio o la cultura; mientras que en el IAE su cuantía será variable.