A medio camino entre los Agullóns de Cariño y el Cabo Ortegal, refugiado entre los espectaculares acantilados de Loiba, se encuentra el puerto de Espasante, un pueblo pequeño que pertenece al concello de Ortigueira. Sus casas de pescadores en primera línea de mar y sus espectaculares playas ofrecen al visitante una tranquilidad única.
La oferta gastronómica de Espasante es limitada pero de alto nivel. A ambos lados de la playa, uno sobre el arenal y otro sobre el puerto, se encuentran los dos mejores restaurantes del pueblo: Os Vellos y A Trapela. Ambos son del mismo dueño, por lo que la esencia es la misma: cocina de mercado de calidad con productos recién llegados del mar.
Os Vellos es un pequeño restaurante situado sobre la playa, en el paseo marítimo. Tiene una amplia terraza con vistas al mar y espacio en el interior. Una carta corta, escrita a mano sobre papel cuadriculado, adelanta la experiencia gastronómica que ofrece el establecimiento: comida casera de alta calidad, sin florituras. Almejas, navajas, zamburiñas y percebes recién llegados del mar comparten protagonismo con sus caldos caseros, con gran éxito incluso en verano. Y es que la zona tiene uno de los climas más cambiantes de toda Galicia, donde no es difícil pasar frío incluso en pleno mes de agosto.
Al otro lado de la playa, junto a la lonja del puerto, se encuentra A Trapela. El concepto es el mismo: cocina de mercado, con protagonismo para los productos del mar, que solo tienen que recorrer unos metros desde la lonja al plato. En su amplia terraza se sirven casi los mismos platos que en Os Vellos, con ligeras variaciones, como el salteado de mar y monte.
Mención especial, en ambos restaurantes, para un plato tan peculiar como sabroso: los berberechos con patatas, una enorme fuente de berberechos sin cáscara sobre una cama de patatas fritas caseras.