Racing 2-1 Valladolid Promesas

No fue el partido contra el Valladolid Promesas el mejor jugador por el Racing en lo que va de temporada, pero sí fue el que le reportó su primera victoria. Después de un mal arranque de, que se tradujo en un gol en contra y en una sensación de fragilidad como no se había visto en toda esta campaña, el equipo ferrolano se rehízo para acabar ganando en una segunda parte en la que demostró una mayor madurez que el rival. Es el resultado que el cuadro verde necesita para ver las cosas más claras.

Se había propuesto el Racing mantener la puerta a cero como camino más rápido hacia la victoria, pero el propósito se le fue al traste en poco más de cinco minutos. Fue lo que tardó el Valladolid Promesas en explotar sus virtudes a través de una contra de Paulo Vitor desde su propio campo que terminó con un tiro raso, al poco de entrar en el área racinguista, que se coló en la portería para poner por delante el conjunto visitante. Menos mal que el cuadro verde repuso al poco la igualdad en el marcador después de que Dani Nieto marcase mediante un disparo llegado de un error defensivo del Promesas que, tras tocar un un defensa, se coló poco a poco en la meta visitante.

Los dos goles fueron el reflejo de un partido en el que el Racing estuvo a merced de su rival durante casi toda la primera parte. Sobre todo, porque permitió que el filial del Valladolid jugase a lo que quería. Es decir, con velocidad en el toque y en la búsqueda del espacio ante un equipo ferrolano que casi siempre llegó tarde y que estuvo a punto de volver a ponerse por delante. Enfrente, el cuadro verde solo encontró la manera de crear peligro con los errores del rival, algo que David Rodríguez estuvo a punto de aprovechar con una volea tras centro desde la derecha.

Al menos, en los últimos minutos del período inicial el Racing cambió su disposición para reforzar el mediocampo y evitar la sangría de la primera media hora para la facilidad con la que el Valladolid Promesas había buscado a sus hombres más avanzados. Entre eso y que el Racing tiró de veteranía para aplacar el ímpetu de su rival, el tramo anterior el descanso fue más tranquilo.

Control

Más calmada fue una segunda parte en el que el Racing, en vista de lo que había pasado en la primera, introdujo de entrada el cambio de Álex López para potenciar el centro del campo. Eso consiguió que este período apenas tuviese cosas que destacar, aunque en una de las pocas ocasiones que el cuadro visitante pudo sacar a relucir su talento Dali estuvo a punto de sorprender al rival.

Con el partido más controlado, el Racing fue el que más empujó en busca de la ocasión que le diese la ocasión de marcar. Y esta llegó, como suele suceder en muchos partidos, a balón parado. Una falta lateral provocó que el balón quedase suelto en el área y que, cuando Fran Manzanara iba a recuperarlo, un rival cometiese una falta sobre él que fue sancionada con un penalti que David Rodríguez transformó. Fue el tanto que puso por delante al cuadro verde y que le terminó dando la victoria, ya que hasta el final el Valladolid B no creó mucho peligro y el Racing no aprovechó las contras.