Hay tradiciones que perviven y que se mantienen y otras que hay que rescatar para que no se pierdan en la memoria de los mayores. Las plantaciones de maíz no son numerosas en la comarca pero donde las hay apenas queda nada de esas reuniones que se llevaban a cabo en torno a la limpieza de las mazorcas. La recreación de la “esfolla” en Narón recuerda esa tradición y enseña a los de menor edad cómo uno puede divertirse con bien poco.