La Consellería de Infraestruturas e Mobilidade ha finalizado las obras de mejora de la seguridad en la vía de alta capacidad Ares-Mugardos (VG-1.2), en la que se sustituyeron las gavias profundas por otras más seguras. La Xunta también ha acometido trabajos similares en otras carreteras autonómicas de la comarca, como en la autovía AG-64 Ferrol-Vilalba; y en las carreteras AC-563 y AC-564, en Cabanas y A Capela. Las tareas en dichos viales supusieron una inversión conjunta de más de 1,1 millones de euros.

“Estradas que perdoan”

Dichas intervenciones, centradas en los márgenes de las carreteras, buscan facilitar la reincorporación de los vehículos en caso de salidas de vía, de acuerdo con el criterio de “estradas que perdoan”, asegura el gobierno autonómico en un comunicado. De este modo, “melloráronse as condicións de circulación nestas catro vías que soportan un gran volume de tráfico rodado”.

Dichos cambios podrán mejorar la seguridad vial cuando, por ejemplo, se averíe un vehículo. “Antes da execución das obras, o vehículo xeraba unha situación de risco, ao non ter beiravía suficiente para parar; coa intervención realizada, esa situación de risco desaparece, ao poder situarse na nova cuneta de seguridade”, explican desde la Consellería.

Así las cosas, los trabajos comenzaron por el pintado de los bordes en las glorietas de los enlaces de la vía de alta capacidad Ares-Mugardos. Las intervenciones supusieron la transformación de las gavias profundas, para lo que también se adaptaron las arquetas y alcantarillas y se reubicaron las barreras de seguridad existentes. 

Las obras incluyeron, asimismo, la reconfiguración de islotes en glorietas, la colocación de elementos de balizamiento y renovación de la señalización vertical, así como la rehabilitación del firme y el repintado de marcas viarias.