El vestuario del Racing intenta alejarse del ruido que está generando el derbi ante el Depor el 16 de abril y centrarse exclusivamente en la preparación del encuentro de este domingo en el Romano José Fouto, en el que se medirá a un Mérida que está asentado en la zona media, con 39 puntos, seis por encima del descenso y a 13 de los puestos de playoff.

Aunque suene a frase hecha, que lo es, el discurso de la plantilla y cuerpo técnico no ha variado un ápice desde pretemporada y, como explicaba ayer el director deportivo, Carlos Mouriz, “la línea que tenemos en el club es que no hay más partido que el siguiente”. Y el siguiente es el Mérida, recordaba esta mañana uno de los “intocables”, Jesús Bernal. “Como siempre hemos dicho”, apunta, “tenemos que ir partido a partido y ahora estamos centrados en hacer un buen trabajo e intentar sacar los tres puntos de Mérida porque sabemos que va a ser muy difícil. No miramos más allá”. 

Aunque el conjunto extremeño ha sumado más fuera que en su feudo –20 por 19–, el mediocentro del Racing subraya la “dureza del choque que les espera” y el hecho de jugarse en un “estadio histórico” del fútbol español. 

Ausencias

El técnico del Mérida, Juanma Barrero, tendrá que recomponer la zaga para medirse al Racing tras confirmar el Juez Disciplinario Único el partido de sanción a Erik Ruiz y Manuel Bonaque. El primero vio ante el Ceuta la quinta amarilla de su primer ciclo de tarjetas y el segundo fue expulsado con doble amonestación en el minuto 80 del partido disputado en el Alfonso Murube (1-0).