La UD Somozas quiere hacer buena la victoria de la semana pasada ante el Polvorín (0-1) ganando esta tarde –17.00 horas, Alcalde Manuel Candocia– a un Choco instalado en una posición delicada (es antepenúltimo) y que, por lo tanto, necesita también puntuar en su visita al feudo somocense.
El técnico del conjunto local, Marco Roca, aseguró ayer que su equipo solo piensa en el triunfo, pues todavía tiene en el recuerdo la derrota de hace dos semanas en casa ante el Viveiro, un espejo en el que, advierte, podría mirarse el cuadro de Redondela por atravesar una situación muy similar a la de los lucenses hace un par de semanas.
Roca reconoce que los tres puntos cosechados ante un candidato al primer puesto como el Polvorín han insuflado una dosis de confianza en su plantilla, que de no ganar la semana pasada podría perder el tren del campeonato. “Ganamos en el momento justo”, admite el preparador.
La última victoria del Somozas coincide con la paulatina recuperación de algunos de sus jugadores. Las lesiones de las últimas semanas han dificultado al cuadro técnico de Roca la confección de la convocatoria. Para hoy ya está en plenas condiciones Álex Cabarcos –que jugó en Lugo unos minutos– y tanto Maroñas como Santi Gegunde ya se incorporaron esta semana a los entrenamientos. Solo Bruno Bellas es baja segura para el encuentro de esta tarde en el campo somocense.
Pese a la diferencia de puntos (50 de los locales y 22 de los visitantes), el entrenador pontés de la UD Somozas no se fía de la posición del Choco. Destaca de su rival su apuesta por el juego combinativo, de elaboración, y por su querencia por la posesión del balón. Además, señala que el hecho de que esté en la antepenúltima plaza tiene más que ver con las lesiones de algunos de sus jugadores importantes que con otras circunstancias relacionadas con el juego. “Vendrán aquí a pelear el partido, sin duda, no van a regalarnos nada”.
Para contrarrestar el potencial del oponente, Marco Roca considera fundamental un aspecto: mantener la portería a cero, pues la competición demuestra que el equipo local es de “marcadores cortos”. Con el blindaje de la meta propia, explica el técnico, “todo es un poco más sencillo” en la búsqueda de la victoria.