Varios miles de personas se manifestaron ayer por el centro de Bilbao, convocadas por la red de apoyo a los presos de ETA Sare y las comparsas de Bilbao, para reclamar que todos los reclusos de la banda cumplan sus condenas en cárceles del País Vasco.

Coincidiendo con el día grande de las fiestas de Bilbao, la manifestación se inició pasadas las 13.00 horas en la plaza de Moyua y finalizó frente al Ayuntamiento, bajo el lema “Etxera bidea gertu (Cerca del camino a casa)”. 

Durante la manifestación, en la que participaron varios responsables de Bildu, se exhibieron pancartas y coreado lemas alusivos a las reivindicaciones de la convocatoria.

Al final de la marcha, los representantes de Sare Joseba Azkarraga y Bego Atxa fueron los encargados de leer un manifiesto en el que destacaron que el hecho de que actualmente el 70 por ciento de los presos de ETA estén en la comunidad supone que se van “quemando etapas, que la denuncia, la movilización y los acuerdos de la mayoría política y social sirven para que los gobiernos y los estados se muevan”.

Sin bajar la guardia
“No bajemos la guardia”, porque “aún nos quedan muchas etapas que ganar”, enfatizaron los portavoces de Sare, quienes han instado a “trabajar por el regreso a casa de los presos y exiliados”.

Aseguraron que la Audiencia Nacional está llevando a cabo una “justicia basada en el afán de revancha”, cuando “un día y otro recurre las decisiones de las juntas de tratamiento de las cárceles en relación a las progresiones de grado o el disfrute de permisos penitenciarios”.

Esta situación, considera Sare, está “impidiendo y bloqueando, sin justificación alguna, la aplicación de una política penitenciaria ordinaria”.

Finalmente, pusieron en valor la actitud de “cada vez más víctimas de la violencia que exigen que en su nombre o aprovechando su silencio no se vulneren los derechos que asisten a las personas privadas de libertad”. 

Por otra part,e la Asociación Profesional Justicia para la Guardia Civil, Jucil, reclamó el amparo del Defensor del Pueblo de Navarra, del Ministerio del Interior y de la Fiscalía General del Estado para que “se evite la comisión de un delito de odio” el 3 de septiembre en Alsasua donde está previsto el llamado “Ospa Eguna”.

En el escrito dirigido a cada una de estas instituciones, propone que se apliquen los medios administrativos y judiciales necesarios para la suspensión de esa convocatoria al considerarla “un delito de odio que persigue como única finalidad la humillación, el acoso y el ataque hacia los guardias civiles”.

A través de estas actuaciones, señala en un comunicado, defienden los derechos laborales y sociales de los guardias civiles destinados en Navarra ante “estos ataques injustificados”.