Hoy se inauguran los eventos que celebran las fiestas de Ferrol, las primeras sin restricciones desde la pandemia. Por este motivo, el concejal de Fiestas, Antonio Golpe, espera que las cifras de asistencia se asemejen a la época previa al covid, dado el éxito de otras iniciativas lúdicas que se desarrollaron recientemente.

¿Cuál es el principal objetivo en estas fiestas?

Es el mismo que todos los años, aunque en este todavía más porque ya volvemos a la normalidad, ya no hay que hacer las anteriores fiestas, que eran muy pequeñas y contenidas por las restricciones, lógicamente. El objetivo es dar de nuevo vida a la ciudad, que la gente pueda disfrutar de ella y que cada uno encuentre el día en el que se ofrezca la actividad o estilo de música que más le guste.

¿Espera que las cifras sean superiores o inferiores a la época anterior a la pandemia?

Todos los eventos que ya se produjeron en las semanas pasadas como el Jazz ao Norte, la Feria de la Cerveza Artesana o la Medieval indican que la gente tiene ganas de distraerse, disfrutar y salir a las calles, lo que desemboca en una vertiente económica que beneficia, por ejemplo, a la hostelería. Por estos antecedentes se espera que al menos se igualen las cifras a las prepandémicas.

¿Qué novedades va a incluir el programa de este año?

En la parte artística todos los años cambian los grupos elegidos, aunque una de las principales novedades son las actuaciones en Doniños, que incluyen más actividades complementarias como las “food trucks”. El objetivo es descentralizar las fiestas de la ciudad y la dinamización del rural, de la misma manera que el año pasado se cambió situándose en O Inferniño.

“La gente tiene ganas de distraerse, disfrutar y salir a las calles, lo que desemboca en una vertiente económica que beneficia a la hostelería ”

¿Qué eventos destacaría de las fiestas?

Es una pregunta difícil porque cada uno tiene sus preferencias. Empezamos con artistas de los 80, que disponen de un público amplio y los que tenemos más años nos vemos reflejados en esa época. Aunque también hay estilos más asociados a los jóvenes como Rozalén o la música electrónica que sonará en Doniños.

También tenemos un festival folk en camino, en definitiva, hay muchas actividades programadas para que la gente esté contenta y disfrute de sus tradiciones. Además se cierra con la actuación de M-Clan y los fuegos de San Ramón, que son de lo más esperado. Llevábamos mucho tiempo esperando por este espectáculo, que hubo que suspender precisamente porque atraen a miles de personas, que quieren verlo desde A Malata y le dan un toque mágico a las fiestas.

¿Cuál es su valoración sobre el resultado final del programa? ¿Cumple las expectativas o le hubiera gustado cambiar algo?

No siempre es así, pero quizás nos hubiese gustado disponer de un presupuesto más parecido a otras ciudades que tenemos cerca, que tienen otro potencial económico y pueden ofrecer actuaciones que cuestan mucho dinero cada una. Aun así, nosotros nos ajustamos a lo que tenemos y la verdad es que para mí, sin sacar pecho ni mucho menos, el plantel que se dedica a la organización de las fiestas ha hecho un trabajo descomunal, además siendo muy pocas personas las que lo componen y sacaron adelante los eventos.

Todo es mejorable pero yo pienso que es un programa digno, entretenido, que busca que cada uno tenga ese día y ese estilo de música que más le gusta o disfruta más que en las demás jornadas. ¿Todo está sujeto a crítica? Por supuesto, siempre que se hace algo hay gente que está más contenta y otra que no. Pero en todo caso, forma parte de lo que supone un cargo público, que siempre está sujeto a la opinión, lógicamente.

En definitiva pienso que tenemos un cartel digno, que le va a dar color a la ciudad y tiene una buena calidad. Aunque no podamos traer a los Rolling Stones, por poner un ejemplo que a algunos nos gustaría, quiero decir que podemos disfrutar igualmente.