La plaza de Armas ya cuenta con arena para eliminar los surcos que tanto han dado que hablar en los últimos meses.
Aunque el tiempo no fue precisamente propicio para la labor, hoy comenzó el acopio de material para reforzar la pérdida de arenilla que se ha constatado desde que se cubrió por primera vez la plaza con este firme.

Las lluvias y los eventos que ha acogido este espacio han ido deteriorando su estado hasta el momento actual en el que, además de surcos en la arena y vegetación naciendo en los bordes y juntas de la plaza han ido saliendo a la luz los soportes metálicos de separación, que, elevados sobre el nivel de la arena, suponen un peligro para el paseante.

El ejecutivo local anunció hace ya algunos meses que procedería a esta actuación, que tendrá que ser continuada con un mantenimiento periódico, que se incluirá entre las tareas a realizar en el nuevo pliego de conservación de parques y jardines de la ciudad, que está en elaboración “para que isto non volva a suceder”, explicó el alcalde, José Manuel Rey, al término de una de las últimas Xuntas de Goberno Local.
Tras días previos de trabajo para calcular los aportes necesarios, ya comenzó esta ampliación de material, que tendrá que ser, posteriormente, colocada y explanada para evitar que se produzcan arrastres.
Precisamente el firme de la plaza ha sido uno de los aspectos más controvertidos de esta urbanización. El proyecto contemplaba la recuperación de la imagen original de la plaza. Para ello se incluyó un firme de conglomerado que incluía áridos y un estabilizante, que garantizaba que no se  apozase el agua, al tratarse de una superficie drenante.

Lo que también incluía el proyecto era la necesidad de llevar a cabo, hasta varias veces al año, un mantenimiento, para conservar esa superficie en el estado adecuado, algo que no se ha hecho en una plaza en la que han sido muchos los eventos realizado, con multitud de público y en el que se han montado puestos y escenarios de todo tipo que han dañado el material.  

A la espera de una intervención en los tilos “estresados”

Otra de las necesidades a las que tiene que hacer frente el Concello es la de poner en marcha una serie de medidas para “salvar” los tilos de la plaza, otro de los elementos significativos de la misma, y que están afectados de estrés en su mayoría. Así, el estudio recomienda una descompactación del terreno –eliminando la capa superficial compactada de terrizo hasta la altura del cuello, implementar alcorques que delimiten la zona de expansión radicular, con cubierta herbácea, y tomar medidas para la escasa permeabilidad del terreno, además de que no se saturen de agua los árboles.