El palacio consistorial de Ferrol acogió ayer los tradicionales actos para conmemorar el aniversario de la Constitución Española, ratificada hace hoy 46 años. Al igual que en ejercicios anteriores, la cita consistió en una recepción en Alcaldía del que sería el conferenciante de la jornada, su posterior firma en el Libro de Oro de la ciudad y, finalmente, la celebración en sí, en la que el invitado de honor ofreció una ponencia sobre algún aspecto de la Carta Magna.
No obstante, este año el evento tuvo un carácter único, casi personal, al ser el conferenciante Leopoldo Moure García, funcionario del Concello de Ferrol desde 1995 y secretario xeral desde el año 2000 hasta su retiro en el presente 2024. Así, todo el acto contó con una faceta de familiaridad, intercalando la oficialidad de la celebración con cierto punto nostálgico y cómplice entre los miembros de la corporación ferrolana.
Una vez finalizada la recepción, ya en el salón de plenos, Rey Varela tomó la palabra para poner en valor la importancia de la Carta Magna, destacando que su elaboración y rúbrica supuso “que todos os españois atopásemos os puntos de encontro”, incidiendo en que “sempre hai diferencias” pero que “o importante da política” es alcanzar acuerdos. “Por iso creo que ese espírito consitucional debe estar presente tamén nos momentos actuais”, aseveró.
Ya en la presentación del ponente, José Manuel Rey apuntó que era una celebración “moi especial” tanto para él como regidor, como para el resto de miembros de la corporación y los anteriores alcaldes, dado que todos ellos habían compartido sesiones plenarias con Moure García. En este sentido, Rey Varela señaló que, en el momento de su jubilación, el antiguo funcionario había participado en más de 400 plenos. “Ser capaz de vivir [tal cantidade] asegúrolles que demostra unha importante capacidade de resiliencia”, bromeó el alcalde.
Así, el regidor ferrolano finalizó su intervención con dos enseñanzas que había recibido del anterior secretario xeral: siempre ir a la fuente –en el sentido de un marco normativo concreto– y que toda decisión tiene que estar motivada para ser legitimada.
Por su parte, Moure García bromeó antes de comenzar su ponencia con el hecho de que ostentaba el récord de la persona con más horas sentado a la mesa desde la que se estaba dirigiendo a los asistentes. De este modo, tras rememorar sus últimos tiempos como secretario xeral del Concello, el conferenciante inició su charla, que centró en la relación de todos los textos constitucionales, pero especialmente el de 1978, con las administraciones locales.
Una vez terminó la ponencia, los asistentes disfrutaron de un ágape como broche final de la jornada.
Por otro lado, el portavoz municipal del BNG, Iván Rivas, señaló por medio de un comunicado que los concejales de su formación no habían asistido al acto porque consideran que la Constitución es “un marco político e constrinxido que impide a nacións como a galega exercer de maneira plena a súa vontade”, además de salvaguardar “unha institución anacrónica como é a monarquía”.
Asimismo, Rivas afeó al regidor que “antepoña a indisoluble unidade de España por riba da vontade democrática das persoas como criterio prioritario para definir o marco político do Estado”.
En paralelo, el Pazo de Mariñán acogió el acto de conmemoración de la Constitución de la Diputación de A Coruña, en el que participaron autoridades locales, provinciales y autonómicas.
Durante su discurso, el presidente del organismo, Valentín González, señaló que la elaboración de la Carta Magna fue “un exemplo de altura de miras e xenerosidade”, recordando que fue firmada por partes “non só dispares, senón históricamente enfrontadas”. En este sentido, el dirigente abogó por “recuperar o espírito do 78” en un contexto sociopolítico “marcado pola polarización e a confrontación permanente” y a rechazar “o tacticismo do canto peor, mellor”.