La concatedral ferrolana de San Xiao está a punto de concluir su obra de rehabilitación, al menos en lo que se refiere a su parte externa –la torre–, y en breve serán retirados los andamios para que se pueda disfrutar de su reforma así como de la veleta colocada ya en la cúspide. Será en el primer trimestre del próximo año cuando finalice el total de la intervención, que incluye, además, actuaciones en el interior tanto en la zona superior del coro como en la entrada.
El conselleiro de Cultura, Educación, FP y Universidad, Román Rodríguez; el obispo, Fernando García Cadiñanos; la delegada de la Xunta en Ferrol; Martina Aneiros; la directora xeral de Patrimonio, María del Carmen Martínez; y el alcalde la ciudad, José Manuel Rey, visitaron las obras y ascendieron a la torre para disfrutar, además, de unas vistas de la ciudad y del Arsenal, que no es frecuente que se puedan presenciar.
El conselleiro recordó que esta actuación es fruto del convenio de colaboración entre la Xunta y el Obispado, por el cual se rehabilitarían dos obras arquitectónicas religiosas en la ciudad: la concatedral de San Xiao y la iglesia de Dolores, con un importe de más de 750.000 euros. La mayor parte, 450.000, irían destinados a la concatedral para las obras de la torre, con la reparación de sus problemas de estabilidad; la restauración del reloj; e intervenciones en el interior; y el resto a Dolores, en una segunda actuación en la que colabora nuevamente la Xunta (en torno a 340.000 euros).
Román Rodríguez valoró la importancia de “manter no mellor estado posible o rico patrimonio da cidade”.
Teniendo en cuenta que las obras son realizadas por el Obispado, García Cadiñanos destacó el desarrollo de las mismas, significando que “se están cumpliendo los plazos de ejecución y llevarlas a cabo desde aquí nos ayuda a tener un control más exhaustivo de la obra”.
Con respecto a los trabajos de la iglesia de Dolores, indicó que se está ultimando el proyecto para iniciar el proceso de contratación y supondrán la restauración interior, de la sacristía y también de la torre.
El regidor local José Manuel Rey agradeció la presencia tanto del conselleiro y representantes de la Xunta como del Obispado y destacó la importancia de la colaboración entre administraciones para conseguir buenos resultados beneficiosos para la ciudad.
Es un ejemplo, indicó el alcalde, de que “cuando trabajamos juntos logramos poner en valor el patrimonio histórico y si las cosas se hacen bien, van para delante en cuanto a la recuperación arquitectónica y del entorno”.
El regidor indicó, además, que tal y como está previsto y como apuntó el obispo, la parte visible desde el exterior de la concatedral estará lista en breve, por lo que coincidirá con la parte de la calle de la Iglesia que le afecta, ya que las previsiones municipales es que este vial esté también abierto al tráfico para Navidad, a falta del último tramo incluido en el proyecto.