El pleno de Ferrol aprobó en la noche del jueves los nuevos porcentajes en la distribución del pago por los servicios de saneamiento, en base a un informe de Augas de Galicia. Si hasta ahora se repartían en un 70% que pagaba Ferrol y un 30% que abonaba Narón, pasan a ser un 57,52% para los primeros y un 42,48% para los segundos. La alcaldesa de Narón, Marián Ferreiro, ha reaccionado a esta decisión, que no ha sido acordada con el municipio que encabeza, acusando al Concello de Ferrol de “deslealdade institucional” al tratar de aplicar unos importes que todavía se están negociando y que, de hecho, en los borradores del futuro convenio ya estaban modificados respecto a lo aprobado (con una proporción de 58,31% y 41,69%).
“O informe ao que fan referencia de Augas de Galicia é preliminar e xa sufriu modificacións tralas aportacións realizadas, formando parte dunha negociación máis ampla que culminará coa sinatura dun convenio entre as tres partes”, especifica la regidora en un comunicado.
Ferreiro se refiere a las conversaciones para que Emafesa deje de gestionar el servicio de saneamiento, que pasaría a llevar Augas de Galicia o saldría a concurso público. Recuerda que desde su municipio se pidió amparo a la administración autonómica “ao querer impoñer Ferrol unha reglas de xogo nun servizo que é común”. Explica que se reunió con el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, y que a partir de ese encuentro, “Augas convocounos aos dous Concellos para tratar de arranxar este conflito”. En ese sentido, expresó su confianza “no cumprimento das conversas que mantivemos no seu día e que serán beneficiosas tanto para as veciñas e veciños de Narón como para os de Ferrol”. Por eso, Marián Ferreiro no entiende que se llevara al pleno sin acuerdo un asunto que está sobre la mesa desde hace meses y en el que su municipio se muestra, asegura, abierto “a calquera negociación”. La respuesta de Ferrol en este tiempo ha sido, afirma, “unha oposición a calquera entendemento”.
También aclara que Narón ha pagado las liquidaciones remitidas por Ferrol de los años 2017, 2018 y 2019, además de la del año 2020, a pesar, en este último caso, de haber pedido la liquidación y que esta no fuese enviada.
Respecto a la instalación de caudalímetros, puntualiza la alcaldesa que “a vontade e dilixencia de Narón quedan patentes cando xa aprobamos ese acordo no pleno do mes de decembro”.
La diferencia en el porcentaje que paga cada Concello es un permanente punto de fricción entre ambos municipios. A pesar de la aprobación en el pleno, la oposición reprochó al gobierno local no haber pactado el cambio.