El patrullero de altura “Atalaya” (P-74), actualmente en una misión de Vigilancia y Seguridad Marítima, recibió, en la madrugada del 14 de noviembre, un mensaje de emergencia de Salvamento Marítimo de Almería que alertaba a los buques que transitan el mar de Alborán de la presencia de una embarcación a la deriva con al menos una treintena de migrantes a bordo. El barco con base en Ferrol procedió a investigar la zona, a unas 30 millas a poniente de la isla de Alborán, y junto con el buque “Ciudad de Melilla”, detectaron la pequeña embarcación.
Ambos navíos informaron a Salvamento Marítimo de Almería quien destacó a la embarcación “Salvamar Gienah”, con base en el puerto de Motril, para asistir a la embarcación a la deriva.
El patrullero de la Armada permaneció en las proximidades de la embarcación cuando advirtió que naufragaba cayendo todos sus ocupantes a la mar. En ese momento y sin dilación, el buque activó todos los protocolos de salvamento, seguridad de la vida humana en la mar y atención a náufragos.
El resultado se saldó con el rescate de 36 migrantes, de origen magrebí quienes, una vez a bordo, recibieron por parte de la dotación atención sanitaria por hipotermia y ansiedad, abrigo y manutención.
Finalmente, a primeras horas de la mañana, los 36 supervivientes embarcaron en el buque de Salvamento Marítimo “Salvamar Gienah” para su traslado al puerto de Motril.