Un día después de la investidura y casi al mismo tiempo que Pedro Sánchez tomaba posesión como presidente del Gobierno en la Zarzuela, el BNG presentaba en Ferrol el acuerdo alcanzado con el Partido Socialista a cambio de su voto afirmativo. La portavoz nacional del partido, Ana Pontón, y el diputado Néstor Rego comparecieron en el Torrente Ballester junto al líder municipal, Iván Rivas, para pormenorizar lo que este documento supone para la ciudad, sobre todo en el ámbito de la movilidad. Los nuevos descuentos en el peaje de la AP-9 y los compromisos para el desarrollo de las infraestructuras ferroviarias están en el eje de unas medidas a las que Rivas se refirió como “punto de inflexión”, mientras que Pontón habló de un “paso decisivo para que Ferrol deixe de ter un ferrocarril do século XIX e pase a ter un tren do século XXI”.
El BNG obtiene para la ciudad, sobre el papel, un juzgado especializado en violencia de género. También se verá beneficiada de las rebajas en el peaje de la autopista. “A AP-9 algún día será nosa e será gratuíta porque é de xustiza”, apuntó Néstor Rego. Mientras tanto, estas bonificaciones han supuesto, recordó el diputado, que se pague una cuarta parte de la tarifa, lo que para un usuario frecuente supone un ahorro de 285 euros mensuales.
En cuanto al tren, los compromisos adquiridos implican que en esta legislatura entre en funcionamiento el “bypass” de Betanzos, que permitiría redefinir el trazado entre Ferrol y A Coruña, acortando tiempos. También en estos cuatro años se creará en Galicia un servicio de cercanías, con prioridad para la áreas metropolitanas de Vigo-Pontevedra y A Coruña-Ferrol. Para esta última se incluye un proyecto de modernización del que se deberá presentar el estudio informativo en 2024. La actualización de la línea de vía estrecha para equipararla en Galicia a las condiciones en Asturias o Cantabria es otra de las patas de la mejora.
El acuerdo de investidura supone, en palabras de Ana Pontón, “un impulso á axenda galega ante o Estado” que “pon a Ferrol no mapa”. Rego subraya que “só o BNG se preocupa por este país e por poñer enriba da mesa as cuestións que afectan a Galiza”. Para Rivas, demuestra que los avances en este país “veñen vehiculizados polo BNG”.
Pontón respondió a las críticas del presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, al acuerdo. Desmintió que haya discriminación a Galicia, ya que el pacto garantiza igualdad de trato.
Acusó al gobierno popular de haber triplicado la deuda gallega en los últimos 14 años, situándola en 5.243 euros por habitante, e instó a Rueda a negociar la quita de esa deuda pública.
Se comprometió a hacerlo si llega a la Xunta, en unas elecciones que prevé que se adelanten, así como a negociar otro modelo de financiacion.