Un total de 30 patrullas del Ejército se han sumando a los efectivos contraincendios de la Xunta de Galicia para reforzar la vigilancia, incrementar la disuasión y tratar de identificar los potenciales agentes de los incendios forestales, según ha explicado este miércoles el conselleiro de Medio Rural, José González.

“Todos juntos, fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, Xunta, Administración del Estado, ahora el Ejército, por supuesto, tenemos que trabajar en esa labor de disuasión y vigilancia, también medios de comunicación y la propia ciudadanía, porque estamos detectando un fuerte componente de intencionalidad en los incendios forestales en Galicia”, ha dicho el conselleiro en Pontevedra.

González se ha expresado en estos términos durante la presentación de las tropas de la Operación Centinela Gallego, que un año más se desarrolla en el marco del convenio entre el Gobierno autonómico y el Ministerio de Defensa.

El objetivo de la presencia militar en los montes gallegos es contribuir a atajar incendios o actividades incendiarias y los efectivos de las Fuerzas Armadas tratarán de aumentar la seguridad de personas y bienes, además de la de la riqueza forestal de la comunidad.

Los efectivos que aporta el Ejército apoyan también a la Unidad de Investigación de Incendios Forestales (UIFO), creada por la Xunta el año pasado y cuya misión es esclarecer las circunstancias y el origen de los incendios.

Además, el dispositivo contra el fuego cuenta con drones y 148 cámaras de última generación que forman la red de vigilancia fija, que están provistas de una tecnología especialmente diseñada para exteriores y vigilancia forestal capaz de identificar incluso matrículas de vehículos.

“Tenemos 148 cámaras que vigilan el 70 por ciento del territorio, que nos permiten ser mucho más ágiles en la extinción, pero también nos permiten detectar posibles comportamientos incendiarios”, ha explicado González.

Por otra parte, el conselleiro volvió a incidir en la importancia de la concienciación y la colaboración ciudadanas.

“Me gustaría trasladar con claridad que hay que apelar a la prudencia en estos momentos de la ciudadanía”, ha dicho González, quien ha recordado que hay actividades que pueden desembocar en incendios forestales, aunque a veces no sea más que por negligencia.

A la ciudadanía, el conselleiro ha pedido también que ayude denunciando “posibles comportamientos incendiarios”, como sucedió en julio, mes en que el teléfono de la Xunta recibió 120 llamadas, algunas de las cuales permitieron abrir diferentes líneas de investigación.