La empresa Einsa ha repartido veinte cartas de despido a nueve empleados que estaban destinados en su centro productivo de Andrade, en Pontedeume, y a once del de Penapurreira, en As Pontes. La empresa argumenta motivos económicos y organizativos para rescindir los contratos, cuando han pasado varios meses desde que se cumplió el plazo de garantía de empleo firmado con el comité.
La falta de carga de trabajo motiva la decisión, que supone cerrar y dejar sin ninguna actividad la imprenta que funcionaba en Pontedeume. Tras estos despidos, Einsa mantiene una plantilla de unos 280 personas.
La actividad del grupo fundado por el eumés Carlos Martínez Pérez ha estado marcada en los últimos años por una intensa conflictividad laboral. Las últimas movilizaciones que protagonizó la plantilla se produjeron hace dos años, en junio de 2012, cuando la empresa pretendía despedir a 26 empleados. Tras 24 días de huelga, el comité llegó a un acuerdo que suponía la readmisión, diferentes recortes en el capítulo salarial y la aplicación de un ERE de suspensión temporal de los contratos –que finalmente no llegó a aplicarse–. Además, la firma se comprometía a mantener el empleo hasta diciembre de 2014.
Cuatro meses después de que expirase aquel compromiso, el grupo Einsa ha repartido veinte cartas de despido sin negociación previa con el comité. El grupo está dedicado a la edición de directorios telefónicos, así como otras publicaciones. Las plantas de As Pontes y Pontedeume tienen capacidad para imprimir 340 millones de páginas al día y las empresas que están implantadas en ambos centros productivos llegaron a dar empleo a más de 700 personas. n