No ha habido hasta ahora mejor momento para que a los de Casas les toque visitar La Granja. Al fortín del Entrerrios Zaragoza, equipo acomodado durante todo el mes de noviembre en la cúspide de la clasificación, llega O Parrulo Ferrol con la inyección de moral que ha supuesto su pase a octavos de final de la Copa del Rey, obrado el pasado martes ante el Ribera Navarra de Primera. 

Llegarán menos reposados que sus oponentes, pero poco les preocupaba el jueves, “cuando los resultados son buenos, las piernas vuelan”, declaraba el entrenador local, aún más claro su pupilo Manu Aguayo, representante de un equipo dispuesto a “ir a la casa del líder e intentar asaltarla”. Y es que, en palabras de Casas, “sin miedo, con nada que perder y muchas ganas de jugar allí” es como afrontan su undecimo partido en liga, a dirimir este sábado a las 19.00 horas en la pista que al equipo local se le antoja como “la más difícil de la competición”.

Que los azulones lleven cinco jornadas dominando tiene bastante que ver, en opinión del técnico, con un par de factores que solo podrán combatir llevando su capacidad de concentración “al límite”. Por un lado, el modelo de juego del Zaragoza, “completamente diferente al resto de equipos, al menos esta temporada”, valoraba Casas, que resulta particularmente difícil de leer en los instantes iniciales del partido, “aunque les veas en vídeo todos los días”, decía. “Tienen un fútbol sala muy peculiar, tanto en ataque como en defensa. Son muy físicos, muy directos, muy prácticos, es un equipo que hace tres o cuatro cosas, muchas veces, pero las hacen muy bien”, sintetizó el preparador. 

Un conjunto que “solo que les des muy poco lo aprovechan como ningún otro equipo en la liga”, advertía el técnico catalán, que destacaba otra particularidad: “es de los pocos que van arriba que mantienen entrenador y bloque de plantilla, y se está reflejando”, con un quinteto inicial consolidado y un potencial homogéneo en toda la plantilla.

Mentalidad ganadora

Ante un equipo rival que solo cuenta con un empate –Ibiza Gasifred– y una derrota –Melistar– en su historial del curso, la escuadra ferrolana se presentará con el “plus” de haber encadenado tres victorias en liga. “Y ya fue el colmo eliminar a todo un Primera, por mucho que digan que venían de una dinámica mala”, señaló Aguayo. Además de encontrar al grupo en su mejor momento, mencionaba el empujón de confianza que a muchos les ha dado tener “protagonismo” en Copa, su caso tras pasar tres partidos en el banquillo, “tanto al propio jugador individualmente como al equipo, que se siente contigo confiado”.