Perplexity AI, una empresa reconocida por su motor de búsqueda impulsado por inteligencia artificial , pronto estará disponible en los nuevos dispositivos móviles de Motorola. Este desarrollo, sin embargo, se produce en un contexto de creciente tensión entre Perplexity AI y el gigante tecnológico Google, enmarcado en un juicio antimonopolio en curso. Un ejecutivo de Perplexity AI testificó recientemente que Google impidió que la empresa fuera designada como el asistente predeterminado en los teléfonos Moto.
La introducción de un competidor de búsqueda basado en IA en el mercado de dispositivos móviles, incluso con ciertas limitaciones, podría indicar una transformación gradual en el predominio de los asistentes virtuales tradicionales. Durante mucho tiempo, Google Assistant ha sido la opción predeterminada en la mayoría de los teléfonos Android. La inclusión de Perplexity, aunque inicialmente no sea como asistente predeterminado, brinda a los usuarios una alternativa y podría estimular una mayor competencia en el sector de la inteligencia artificial móvil a largo plazo.
El testimonio de Dmitry Shevelenko, Director de Negocios de Perplexity AI, durante el juicio antimonopolio contra Google resultó particularmente revelador. Shevelenko expuso cómo los acuerdos contractuales entre Google y Lenovo, la empresa matriz de Motorola, obstaculizaron la posibilidad de que Motorola seleccionara a Perplexity AI como el asistente predeterminado en sus nuevos teléfonos inteligentes.
A pesar del interés manifestado por ambas compañías, Motorola se vio imposibilitada de modificar el asistente predeterminado. Como resultado, la aplicación de Perplexity AI se preinstalará en los dispositivos, pero no se mostrará en la pantalla de inicio de manera predeterminada.
Shevelenko describió los contratos de Google como una forma de coerción para las empresas, comparándolos con tener una "pistola en la cabeza", lo que subraya la considerable presión que Google ejerce sobre los fabricantes de dispositivos y los operadores de telefonía móvil.
La estrategia de Google de emplear contratos para asegurar la exclusiva de sus servicios podría interpretarse como una táctica destinada a reprimir la competencia, incluso en áreas donde un competidor podría ofrecer una alternativa que tanto el fabricante como, potencialmente, los consumidores considerarían deseable.
Si tanto Motorola como Perplexity aspiraban a que este último se convirtiera en el asistente predeterminado, pero un acuerdo con un tercero (Google) lo impidió, esto sugiere que Google está utilizando su influencia en el mercado de Android para favorecer sus propios servicios, restringiendo la capacidad de los fabricantes para innovar y ofrecer diversas opciones a los usuarios.
A pesar de las limitaciones impuestas, los usuarios de los teléfonos Moto podrán acceder a Perplexity de diversas maneras. La aplicación estará preinstalada en los nuevos teléfonos inteligentes de Motorola a nivel global. En particular, los usuarios de los dispositivos Razr se beneficiarán de funcionalidades específicas, como la capacidad de utilizar Perplexity en la pantalla externa cuando el teléfono está plegado.
Además, el Asistente de Perplexity podrá realizar tareas que van más allá de la simple búsqueda de información, como la reserva de restaurantes. Los usuarios también tendrán la opción de acceder directamente a Perplexity escribiendo el comando "Ask Perplexity" a través de la interfaz Moto AI.
La integración también incluye la función "Related Questions" de Perplexity, que permite a los usuarios explorar temas con mayor profundidad. A pesar de las restricciones impuestas por Google, la integración de Perplexity en las funcionalidades distintivas de los teléfonos Moto, como la pantalla externa del Razr, sugiere un esfuerzo por ofrecer un valor añadido y una diferenciación a los usuarios.
El testimonio de Shevelenko tuvo lugar en el contexto de un amplio juicio antimonopolio contra Google, acusado de mantener un monopolio ilegal en el mercado de búsquedas. El Departamento de Justicia de los Estados Unidos busca determinar las medidas correctivas apropiadas después de que se dictaminara que Google había incurrido en un monopolio ilegal en el ámbito de las búsquedas.
Este juicio podría desencadenar cambios trascendentales en la dinámica de la industria tecnológica y en las políticas de competencia. Se acusa a Google de emplear contratos coercitivos para sofocar la competencia y la innovación.
El testimonio de Perplexity no solo busca facilitar su integración en los teléfonos Moto, sino que también se alinea con el objetivo más amplio del Departamento de Justicia de debilitar el control de Google sobre el mercado de búsquedas y servicios relacionados. Al presentar pruebas de cómo Google supuestamente obstaculiza la competencia en áreas como los asistentes predeterminados, Perplexity está contribuyendo al argumento general del gobierno de que Google está empleando prácticas anticompetitivas para mantener su dominio.
La perspectiva de Perplexity AI es que el problema fundamental no radica en el navegador Chrome, sino en el control que ejerce Google sobre las configuraciones predeterminadas de Android.
El CEO de Perplexity AI, Aravind Srinivas, sostiene que desmantelar Chrome perjudicaría a los usuarios sin abordar la cuestión central del control de Google sobre los valores predeterminados de Android. Perplexity AI aboga por una auténtica libertad de elección para el consumidor y critica la práctica de Google de obligar a los fabricantes de teléfonos a preinstalar sus aplicaciones para acceder a servicios esenciales como Play Store y YouTube.
Shevelenko reiteró su descripción de los contratos de Google como una "pistola en la cabeza" que dificulta la entrada de competidores al mercado. La estrategia de Perplexity de centrarse en la cuestión de los valores predeterminados en Android podría ser una táctica más efectiva para desafiar el dominio de Google en el ecosistema móvil que intentar competir directamente con su motor de búsqueda principal.
Modificar los valores predeterminados podría tener un impacto inmediato en el uso de los servicios por parte de los usuarios. Si Perplexity pudiera convertirse en una opción predeterminada, incluso en ciertos dispositivos o para funciones específicas, podría ganar una tracción significativa.
Si bien Google no ha emitido una respuesta directa a las acusaciones de bloqueo del asistente predeterminado, su reconocimiento en el juicio de que Perplexity se integrará en los teléfonos Moto podría interpretarse como una confirmación implícita de la colaboración, aunque sin abordar las restricciones impuestas.
Es posible que la presencia de Perplexity en los teléfonos Moto, incluso con limitaciones, aumente su visibilidad y adopción por parte de los usuarios. Esto también podría tener un impacto en otros fabricantes de dispositivos y desarrolladores de software que buscan competir con los servicios preinstalados de Google.
La resolución del juicio antimonopolio contra Google podría tener consecuencias trascendentales no solo para Perplexity y Google, sino para todo el ecosistema de Android, abriendo potencialmente oportunidades para que otros competidores ganen una mayor prominencia en los dispositivos móviles.
Si el gobierno de EEUU logra obligar a Google a modificar sus prácticas contractuales y permitir una mayor flexibilidad en la elección de aplicaciones predeterminadas, esto podría fomentar la innovación y ofrecer a los consumidores más opciones en cuanto a asistentes virtuales, navegadores, motores de búsqueda y otros servicios.